Me alejo de la preocupación obsesiva por los demás y encuentro una preocupación sana y relajada por ellos.
Preocuparse por los demás se convierte en un problema propio.
A las personas con esta debilidad de carácter les cuesta distanciarse de los problemas de los demás. Se sienten tan unidos con sus seres queridos que estas relaciones a veces adquieren rasgos simbióticos.
Esta persona se preocupa en excesivo por el bienestar de sus seres cercanos. A menudo teme que algo les sucede o que estos no estén bien.
Además, los afectados tienen la tendencia de darle demasiado peso a las preocupaciones y dificultades de los demás, puesto que sufren con ellos y sienten el dolor ajeno de la misma manera que el propio.
Con ayuda del castaño rojo es posible conseguir una desvinculación. Los problemas de los demás ya no se sobreponen a los propios y se pueden observar desde una distancia sana.
Esta esencia se encuentra en los siguientes productos:
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